En el juego de la seducción, el primer paso debe ser una cita en un escenario propicio e íntimo, el mejor posible, que normalmente siempre acaba siendo un restaurante en el que una cena dé comienzo a la noche. Y es que la experiencia nos dice que nunca falla, por lo que ésta sigue siendo la reina de las citas.
El problema llega a la hora de elegir el restaurante adecuado. Esta decisión depende de la imagen que quieras que la otra persona perciba de ti, pero te aconsejamos que no caigas en el exceso ni en la excentricidad. Muchas veces un restaurante sencillo con una buena carta es preferible a un costoso menú en un restaurante elegantón, en el que no encontréis el ambiente idóneo para relajaros y hablar tranquilamente; en definitiva, para conoceros.